Si has llegado hasta aquí es porque por fin te has decidido a aprender a tocar el piano. Seguro que siempre ha sido tu sueño pero, por obligaciones de la vida cotidiana no habías podido sacar tiempo hasta ahora. Si estoy en lo cierto, estás en el lugar adecuado, pues en las siguientes líneas te presentaré los 5 tips imprescindibles para iniciarte en el apasionante mundo de la música. ¡Vamos allá!
1. Pasión: nunca es tarde
Seguro que has oído innumerables veces que, si no empezaste a tocar el piano desde niño, ya has perdido tu oportunidad. Pues no es verdad. Nunca es tarde para aprender nada en la vida, y tampoco para tocar el piano. Lo único cierto es que de niños aprendemos más rápido debido a la mayor plasticidad cerebral, pero de adultos tenemos más capacidad de concentración, fuerza de voluntad y un mayor bagaje cultural que nos ayudará en nuestro aprendizaje. Por ello, lo más importante para aprender a tocar el piano es tener ilusión y ser capaz de mantenerla durante el camino. ¡Querer es poder!
2. Paciencia: “Quien tiene paciencia, obtendrá lo que desea”
Sí, Bill Gates fue quien dijo que la paciencia es la clave del éxito, pero no inventó nada nuevo. Ya en el siglo XVIII, Benjamin Franklin ya sabía que con paciencia, todos podemos obtener lo que ansiamos. Lo que está claro es que estos dos hombres tenían la misma opinión sobre la paciencia y ambos lograron lo que se proponían. ¡Hagámosles caso!
Para aprender a tocar el piano, la paciencia es fundamental, pues los avances son lentos y puede llegar a resultar algo frustrante. No te agobies si llevas varias días trabajando la misma pieza: habrá obras que tardes meses en dominar, pero nunca llegarás a hacerlo si te rindes. Céntrate en el proceso y no en el resultado, valora los pequeños avances. El camino de la música es agradable y enriquecedor, disfrútalo.
3. Planificación: “La organización vence al tiempo.”
Juan Domingo Perón estuvo muy acertado con esta afirmación. Si crees que tienes demasiadas obligaciones y que te va a ser imposible sacar tiempo para practicar, haz de la organización la ley superior de tu día a día. Si escribes listas de tareas y eres realista con tu tiempo, estoy convencida de que podrás sacar un ratito para dedicarlo al piano. Recuerda, debes practicar todos los días, aunque sea durante poco tiempo, pero todos los días.
Divide la pieza en secciones y dosifica tu trabajo, avanza poco a poco cuando ya domines lo anterior. Y, muy importante, practica con cabeza, sé consciente en todo momento de lo que estás haciendo y de cómo estudias, obsérvate. Más vale media hora bien trabajada, que dos horas de trabajo desorganizado e inconsciente.
4. Perseverancia: “Una sucesión de pequeñas voluntades consigue un gran resultado.”
Charles Baudelaire tampoco se equivocaba. La constancia es la capacidad de dividir una gran meta en pequeños objetivos y superarlos paulatina, pero incansablemente.
Sé constante, practica todos los días un poquito. Dedicando una hora al día, todos los días, pronto observarás tus progresos. Es preferible dedicar una hora al día, pero todos los días, que practicar un día a la semana durante cinco horas. Aprender a tocar el piano es como practicar un deporte: los beneficios se obtienen cuando hacemos de ello un hábito. No permitas que te pueda la pereza, ¡la procrastinación está prohibida! Recuerda que la música es divertida, no es una obligación más, es tu momento del día para disfrutar haciendo lo que te gusta y lo quieres. ¡Aprovéchalo!
5. Preparación: “La creatividad se aprende, igual que se aprende a leer”. Ken Robinson
La música es un arte complejo, tanto, que utiliza un lenguaje propio. Si empiezas desde cero, tendrás que tener claro que, si quieres avanzar, deberás aprender este lenguaje, el lenguaje musical. La música está dentro de ti, pero no podrás exteriorizarla si no conoces su funcionamiento.
Existen distintas vías de formación musical, todas diferentes y válidas. Si buscas un reconocimiento oficial, debes acceder a un conservatorio. Si no es tu caso, una academia privada es buena opción. Si prefieres aprender desde casa, también existe la opción del autodidactismo, pero no lo recomiendo, pues si no tienes nociones previas, te será muy difícil percibir tus errores y, más todavía, corregirlos. Sin embargo, si te resulta atractiva la idea de aprender desde casa y quieres tener un buen profesor que guíe tu aprendizaje, lo que necesitas son clases online.